Son colectivos de usuarios con objetivos en común que a través del blockchain facilitan y aseguran la ejecución de acuerdos sin necesidad de conocerse.
Organización descentralizada
Una DAO, conocida por sus siglas en inglés como "Decentralized Autonomous Organization", es una forma de organización colectiva que opera sin un liderazgo centralizado. A través de contratos inteligentes programados en el blockchain, se establece un conjunto de reglas que definen las atribuciones de la organización, las cuales pueden ser modificadas posteriormente mediante la votación de sus miembros. Estas reglas son completamente visibles y accesibles para todos, lo que permite a los integrantes y potenciales miembros comprender completamente el funcionamiento de la organización. Los integrantes de una DAO tienen la capacidad de proponer acuerdos, los cuales son sometidos a un proceso de votación y solo se implementan si alcanzan un cierto nivel de consenso.
Recaudación de fondos
Por lo general, una DAO se financia mediante la emisión de sus tokens, los cuales se venden para formar una tesorería. Esta tesorería es administrada a través de acuerdos entre sus miembros, quienes tienen la capacidad de asignar fondos para diversos objetivos. Otros tipos de financiamiento pueden incluir aportes voluntarios, subvenciones de organizaciones que respaldan los objetivos de la DAO o contribuciones realizadas por inversionistas.
Afiliación
La forma de afiliarse a estas organizaciones es adquiriendo el token de la DAO, con el cual podemos operar en su protocolo y participar en las votaciones. Estos tokens se pueden intercambiar o vender libremente, y generalmente no hay otras barreras de entrada. Sin embargo, algunas DAOs tienen accesos más restringidos debido a su especialización, integrando a sus miembros en base a su participación y contribuciones. En estas DAOs, los miembros solo pueden ser nominados por otros a través de una votación.
Participación
Cada usuario que posee el token de una DAO tiene derecho a realizar propuestas y votar en la organización. Por lo general, el peso del voto es proporcional a la cantidad de tokens que uno tenga, aunque se pueden adoptar distintos mecanismos de votación. Estas votaciones están relacionadas con temas de gobernanza, asuntos técnicos del protocolo o la asignación de fondos de la tesorería para financiar proyectos, compras colectivas o recompensas para los miembros de la comunidad.
Las votaciones realizadas quedan registradas, y de hecho, es posible acceder a los registros de votaciones de cualquier miembro en particular, así como a las propuestas que hayan presentado. De esta manera, las DAOs permiten una participación democrática y transparente en la gestión de sus recursos y decisiones.
Financiamiento colectivo
A medida que incorporamos este concepto como una forma viable de organización y recaudación de capital, podemos presenciar una transformación completa de lo que actualmente conocemos como financiamiento colectivo. Un ejemplo de esto es la DAO Krause House, que se ha propuesto el extraordinario objetivo de comprar un equipo de la NBA. Imaginar a los propios hinchas como dueños de un equipo y tomando decisiones nos abre un camino totalmente nuevo para explorar. Por otro lado, DAOs como Flamingo han reconocido el potencial en las curaciones de arte NFT y están formando su propia colección. Además, han surgido diversos colectivos que se han organizado para realizar compras exclusivas, como adquirir un disco único de Wu-Tang Clan, una rara copia de Dune de Jodorowsky o una copia original de la constitución de los Estados Unidos.
Colectivos con miembros que no se conocen han podido encontrar una forma de lograr objetivos difíciles de alcanzar y de intereses muy selectos como para financiarlos de otra manera. El financiamiento desde las comunidades va a permitir un surgimiento de proyectos que no necesariamente buscan el interés general o se estructuran para maximizar su rentabilidad, entregándonos a cambio más diversidad y productos con más significado.